¿De qué va Next Step? Una historia que irás creando tú. Decisiones que deberás tomar con sabiduría. O no. Pero, digas lo que digas, decidas lo que decidas, nuestra protagonista lo vivirá en sus carnes.
¿Cómo puedes decidir? Por twitter.
Bueno, vamos con el proyecto #NextStep!!! ¿Listos para muchas encuestas y ser mala gente? Hilo a partir de ahora!— Marta Conejo Ψ (@martacse) 8 de octubre de 2017
¿Dónde puedes leer la historia? Desde el hilo de twitter o desde aquí.
También, si rellenas este formulario, te lo iré enviando.
Y a continuación, la historia:
¿Quién es la protagonista?
Por ahora: Pili, una mujer de rostro inexpresivo que porta una espada. Esta persona (por ahora ella sola) vivirá todos los tormentos que tú le quieras echar.Bueno, pues os presentamos a PILI, la espadachina de rostro inexpresivo. Dibujar no es mi fuerte. Pili irá cambiando con las decisiones. pic.twitter.com/C701C6XNvC— Marta Conejo Ψ (@martacse) 8 de octubre de 2017
¿Cómo es el proyecto #NextStep?
Un papel, decisiones, historia que avanza. Así de simple. Desde el hilo podrás ver cómo hemos construido el principio de la historia. Iré poniendo el resultado de las votaciones y cómo sigue la historia. Vamos allá.
9 de octubre: 1º capítulo
Primera escena, primera decisión. ¿Correr o enfrentarse? ¿Pero de qué? ¿DE QUÉ ESTAMOS HUYENDO? #NextStep #Cap1 pic.twitter.com/pUWkMJMBty— Marta Conejo Ψ (@martacse) 8 de octubre de 2017
Respiraba. Claro
que respiraba. Abrió los ojos, sintiendo cómo sus manos entumecidas comenzaban
a ganar sensibilidad. Tuvo la intención de apretarlas para formar un puño, pero
entonces lo sintió en su mano derecha: un tacto duro y frío que le impedía
cerrar su mano. Su cabeza no daba vueltas, sino que corría como un caballo
desbocado, golpeándose contra su cráneo. Hizo acopio de fuerzas para mirar a su
derecha, contemplando la espada que descansaba al lado de su mano. Le dedicó
una mirada indiferente, como si aquello restase importancia a que, un 9 de
Octubre de 2017, en Madrid, alguien en su sano juicio tuviera una espada y no
fuera para decorar.
Se levantó apoyándose
en el sillón de tela carcomida, contemplando las cuatro paredes oscuras y
sucias que le rodeaban. El ambiente era húmedo, cargado de polvo y de moho.
Quería vomitar, sin saber si era culpa del olor o de cómo se sentía. ¿Dónde
estaba? ¿Y qué había hecho para acabar allí? ¿Algún ligue mal encaminado? Debía
dejar de usar Tinder.
Con las rodillas
en el suelo, apoyó la punta de la espada en el suelo, sirviéndose como bastón.
Admitía sentirse como la protagonista de una película épica, como las de
Marvel. Ya tendría tiempo de descubrir cómo había llegado esa espada hasta ella…
Alguien llamó a la
puerta. Levantó la mirada, encontrándose con un trozo de madera bien trabajado,
limpio pese a la suciedad e inmundicia que rodeaba el lugar. Juraría que
aquella puerta no estaba allí cuando intentaba levantarse. Alguien volvió a
llamar… y comenzó a abrirse lentamente, surgiendo del umbral una mano pálida y
alargada.
Se levantó como un
resorte, aunque sus piernas temblorosas querían hacerla caer: asió la espada
sin ninguna práctica y maestría, imitando a los actores de las películas,
frunciendo el ceño. Como si su cabeza le jugase una mala pasada, se acercó a la
puerta, abriéndola de golpe y dejando que la persona que había tras ella
cayera.
Era una mujer delgada,
pelirroja, de ojos azules. Le observó desde el suelo, con un gesto de dolor y
de incordio. No se levantó del suelo, viendo cómo Pili, nuestra Pili, había
conseguido sorprenderla.
—Escúchame —acabó mascullando
la mujer, consiguiendo arrodillarse, aunque sin intención de atacar—. No lo
leas. Sea lo que sea que veas ahora, no lo leas. ¿Me entiendes? Sigue tu vida. No
tienes que se parte de esto. No eres
parte de esto.
La voz siseante
desapareció junto con ella, transformándose en humo, ceniza y humedad. Sintió
que se había quedado impregnada de ella. Lamentablemente, no se sorprendió al
ver un pequeño papel enrollado donde segundos antes estaba la siniestra mujer.
Se agachó, cogiendo el papel y girándolo. Sentía que vibraba desde dentro.
Tragó saliva, sin quitarle ojo… pero sin saber qué hacer.
Y ahora...
Leer o no leer? Pensad las posibilidades de cada opción. Y de la pobre Pili y su mala pasada de Tinder. Un día, chicos!— Marta Conejo Ψ (@martacse) 9 de octubre de 2017
SEGUNDO CAPÍTULO
Aquí tenemos el segundo capítulo de Pili, su #NextStep. A continuación, la encuesta. Ya sabéis :D pic.twitter.com/VZHP0wxz6h— Marta Conejo Ψ (@martacse) 10 de octubre de 2017
Y la encuesta para el #NextStep!
Un día para responder. Pensad detenidamente. O no, aunque Pili se lo merece.— Marta Conejo Ψ (@martacse) 10 de octubre de 2017
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